Con el fin de visibilizar y crear conciencia sobre los Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA), el 30 de noviembre se conmemora el Día Internacional de la lucha contra estos desórdenes que afectan en nuestro país a muchas personas, mujeres jóvenes en su mayoría. Fomentar el entendimiento y apoyo hacia quienes los padecen, así como promover la prevención y el acceso a tratamientos adecuados, es clave para mejorar su bienestar y favorecer su recuperación
Los TCA afectan aproximadamente a unas 400.000 personas en España a día de hoy y se estima que los casos aumentarán en torno al 12% en los próximos 12 años, lo cual plantea un desafío cada vez mayor para la salud pública. El incremento de estos desórdenes en la actualidad se debe a varios factores, incluido el impacto de la pandemia en la salud mental de los jóvenes o el impacto de las redes sociales en este grupo de población, que pueden agravar o desencadenar estos trastornos en los adolescentes al promover estereotipos de imagen corporal poco realistas.
Personas afectadas
Los TCA son especialmente prevalentes entre adolescentes y jóvenes, afectando más a mujeres. Aproximadamente el 5 % de las jóvenes entre 12 y 21 años padecen TCA, lo que supone casi el 90 % de los casos en el país. Es importante tener en cuenta que estas cifras se refieren exclusivamente a las personas que están en tratamiento y, por lo tanto, pueden contabilizarse. Sin embargo, hay más personas que padecen estos problemas y no están en tratamiento o no reciben tratamiento en el Servicio Nacional de Salud.
Recursos de tratamiento
A pesar del aumento de casos, los recursos para el tratamiento son insuficientes en muchas áreas. Debido a ello, los pacientes de algunas provincias deben recurrir al sistema privado o desplazarse a otras comunidades para recibir atención especializada.
Estos trastornos, que suelen comenzar a edades tempranas (a partir de los 12 años), requieren una intervención temprana para prevenir la larga duración y mejorar los resultados de la terapia. El tratamiento debe ser multidisciplinario e incluir apoyo a las familias para una recuperación efectiva. Por otro lado, sería importante incrementar las estrategias de prevención y educación, especialmente en entornos escolares, para frenar el avance de los TCA y mejorar la detección y el tratamiento temprano de este tipo de problemas en España.
Prevalencia e incidencia
Cuando hablamos de TCA nos referimos a varios desórdenes: la anorexia nerviosa, la bulimia nerviosa, el trastorno por atracón, la pica, el trastorno de rumiación, el trastorno de evitación/restricción de la ingesta de alimentos y trastornos alimentarios no especificados o incompletos (no cumplen criterio para estar incluidos, pero si necesitan tratamiento). La prevalencia se refiere al número total de casos de este trastorno, tanto los casos nuevos como a los persistentes.
- Prevalencia
Anorexia nerviosa y bulimia nerviosa. Según estudios recientes, la prevalencia combinada de la anorexia y la bulimia nerviosas en España supone alrededor del 3-4% de las mujeres jóvenes (adolescentes y adultas jóvenes), siendo menos común en hombres, donde este ratio está en torno al 0.3-1%.
Trastorno por atracón. Se estima que afecta aproximadamente al 2-3% de la población en general. Es más frecuente entre adultos que otros TCA.
Cuadros incompletos. Se observa un aumento de casos subclínicos. Es decir, aquellos que muestran síntomas sin llegar a complir los criterios diagnósticos completos. El porcentaje de estos cuadros incompletos puede representar hasta el 8-10% de los adolescentes. Es importante señalar que estos trastornos también necesitan tratamiento porque implican un gran sufrimiento en quien los padecen y, además, pueden evolucionar a cuadros completos.
- Incidencia de los TCA
La incidencia de un trastorno se refiere al número de casos nuevos en los últimos años. Los TCA han mostrado un incremento durante las últimas décadas, especialmente entre adolescentes y adultos jóvenes. Se estima que aproximadamente 4 de cada 100 jóvenes desarrollan algún tipo de TCA.
Durante y después de la pandemia de COVID-19, hubo un repunte significativo en los casos nuevos de TCA en España, debido a factores como el aislamiento, el aumento del uso de redes sociales, y el estrés psicológico. Los estudios sugieren un aumento del 30-40% en las consultas relacionadas con TCA en servicios de salud mental.
Factores de riesgo y vulnerabilidad
Los TCA son multifactoriales y están influenciados por factores genéticos, psicológicos y sociales, como por ejemplo:
Presión social y cultural hacia la delgadez, impulsada por medios de comunicación y redes sociales.
Factores psicológicos como la baja autoestima, ansiedad y perfeccionismo.
Entorno familiar y antecedentes de obesidad o TCA en la familia.
Las mujeres jóvenes son el grupo con mayor riesgo, aunque en los últimos años se ha notado un aumento de casos entre varones y en población infantil.
Redes sociales e internet. Están jugando un papel destacado en la incidencia de los TCA en España. El contenido que promueve ideales de belleza poco realistas o prácticas poco saludables ha contribuido al desarrollo de TCA, especialmente en jóvenes. Al mismo tiempo, existen campañas de sensibilización y prevención en redes.
Prevención y tratamiento en España
La situación actual en España aún es deficitaria en lo que se refiere a la realización de programas de prevención y facilitar el acceso al tratamiento de quienes lo padecen
Programas de prevención. En los últimos años, se han implementado más programas educativos en colegios y campañas en redes sociales para informar sobre los riesgos de los TCA y promover una imagen corporal saludable.
Acceso al tratamiento. La atención a los TCA en el sistema público de salud español ha mejorado, aunque sigue siendo insuficiente en algunas áreas. El tratamiento incluye terapia psicológica, nutricional y en casos graves, hospitalización. La situación es especialmente dura en los casos de ingreso hospitalario.
Tendencias actuales en los estudios
La investigación señala cuatro puntos importantes a considerar en este momento presente
Aumento de casos subclínicos. Muchos estudios coinciden en que existe un número elevado de casos subclínicos, que no cumplen con todos los criterios diagnósticos pero presentan riesgos importantes.
Mayor incidencia en adolescentes. Los adolescentes y adultos jóvenes, especialmente mujeres, son el grupo de mayor prevalencia en casi todos los estudios.
Creciente preocupación por el trastorno por atracón. A diferencia de la anorexia y la bulimia, el trastorno por atracón es un TCA común en adultos y se ha incrementado en prevalencia.
Impacto de la pandemia. La COVID-19 ha sido un detonante para el aumento de los TCA en España, exacerbando factores de riesgo y retrasando el acceso a tratamiento en muchos casos.