Desenfócate de los pensamientos TCA (Trastorno de Conducta Alimentaria) vinculándote a alguna actividad lúdica
Si sufres un TCA tienes tu atención enfocada desproporcionadamente en aspectos relacionados con la comida, el peso o la imagen corporal. Esta atención selectiva te frena en tu recuperación, porque distorsiona la percepción de la realidad y hace que te centres en aspectos negativos o en miedos, mientras que ignoras o no percibes situaciones positivas que pasan a tu alrededor. Para recuperarte necesitas un tratamiento con profesionales especializados y, además, cambiar el foco de tu atención selectiva para lo negativo. Una buena idea para conseguirlo es retomar o iniciarte en alguna afición que te guste. El objetivo es pasar un rato entretenido, dejando fuera las exigencias, la edad, los conocimientos…
El Trastorno de Conducta Alimentaria (TCA) y la atención selectiva
La atención selectiva se refiere a la capacidad de concentrarse en ciertos estímulos mientras se ignoran otros, y puede influir en los patrones de pensamiento y comportamiento de las personas con TCA. En personas con TCA habitualmente está enfocada en aspectos relacionados con la comida, el peso o la imagen corporal. Este hecho puede mantener o exacerbar el trastorno, ya que distorsiona la percepción de la realidad, haciendo que se subestime el impacto de la desnutrición o se sobrevalore la importancia de cumplir con ciertas metas corporales. Además, la atención selectiva también puede afectar la recuperación, ya que la persona puede enfocarse en aspectos negativos o en miedos relacionados con la comida, mientras ignora la información o las sensaciones que podrían ayudarle a mejorar su salud física y mental.
La importancia de las aficiones en los TCA
Los intereses personales pueden tener un impacto significativo en las personas con Trastornos de la Conducta Alimentaria (TCA) de manera positiva, para ayudar a manejar la abstracción selectiva respecto de los síntomas.
Aficiones creativas. Actividades como el arte, la escritura, la música o la fotografía pueden ser vías de escape saludables que permiten a la persona expresar emociones, aliviar el estrés y enfocarse en aspectos no relacionados con su imagen corporal o alimentación.
Actividades mente-cuerpo. Prácticas como el yoga (cuando se realiza de manera consciente y no como una forma de ejercicio excesivo), la meditación o el mindfulness pueden ayudar a las personas con TCA a reconectar con su cuerpo de una manera más saludable y a desarrollar una mejor autocompasión.
Actividades grupales. Las actividades sociales, como el teatro, clubes de lectura o grupos de voluntariado, pueden proporcionar un sentido de comunidad, reducir el aislamiento y desviar el foco de atención de los pensamientos obsesivos relacionados con la alimentación o el cuerpo.
Beneficios de tocar un instrumento para los TCA
La terapia basada en música o aprender a tocar un instrumento puede desempeñar un papel beneficioso para las personas con TCA, si aprenden a no autoexigirse en exceso, toleran la frustración de un aprendizaje complejo y disfrutan de los pequeños avances. En el tratamiento de los TCA, actividades como tocar un instrumento pueden ser parte de un enfoque terapéutico integral que incluya la psicoterapia, la terapia nutricional y, en algunos casos, la medicación.
- Reducir el estrés y la ansiedad. La música puede calmar la mente, ayudando a las personas con TCA a lidiar con el estrés o las emociones que desencadenan comportamientos alimentarios disfuncionales. Un estudio de *Krumhansl* (1997) mostró que la música, incluida la práctica del piano, puede disminuir los niveles de cortisol, la hormona del estrés.
- Fomentar la expresión emocional. Muchas personas con TCA tienen dificultades para expresar sus emociones, y la música les ofrece una vía no verbal para liberarlas.
- Mejorar el enfoque y la disciplina. Aprender requiere concentración y práctica, lo que puede ayudar a las personas a desarrollar una rutina saludable y a enfocarse en algo fuera de los pensamientos relacionados con la comida, la imagen…
- Aumentar la autoestima. Lograr tocar una pieza con éxito puede dar una sensación de logro y mejorar la autoestima, aspecto que muchas veces está afectado en quienes padecen TCA.
Ventajas neurológicas de aprender a tocar el piano
Los estudios neurocientíficos han demostrado que aprender y practicar el piano puede tener múltiples beneficios para el cerebro, mejorando tanto la estructura cerebral como su función.
- Favorece la plasticidad Cerebral. Diversas investigaciones han demostrado que tocar el piano induce cambios en la plasticidad cerebral, que es la capacidad del cerebro para reorganizarse a lo largo del tiempo. Un estudio realizado por el neuropsicólogo Lutz Jäncke y su equipo demostró que los pianistas tienen un mayor volumen de materia gris en áreas del cerebro asociadas con la coordinación motora y la percepción auditiva. La práctica regular del piano puede aumentar la conectividad entre las regiones del cerebro, mejorando habilidades como la memoria, la atención y la capacidad para realizar múltiples tareas.
- Mejora la comunicación de los dos hemisferios. Tocar el piano requiere el uso de ambas manos de manera coordinada, lo que fortalece el cuerpo calloso, la estructura que conecta los dos hemisferios del cerebro. Un estudio de *Gaser y Schlaug* (2003) encontró que los músicos tienen un cuerpo calloso más grueso, lo que facilita la comunicación entre los hemisferios. Esta mejora en la conectividad interhemisférica puede mejorar la coordinación motora fina, la percepción espacial y el procesamiento de la información.
- Mejoras en la Memoria y el Envejecimiento. La investigación de *Hanna-Pladdy y Mackay* (2011) mostró que los adultos mayores que habían recibido entrenamiento musical durante su vida (como tocar el piano) tenían un rendimiento cognitivo superior en comparación con aquellos que no habían recibido dicho entrenamiento. Esto sugiere que tocar el piano puede retrasar el declive cognitivo asociado con el envejecimiento.
10 Beneficios de hacer cerámica
La cerámica es una actividad que ofrece numerosos beneficios tanto a nivel físico como mental y emocional. Aquí tienes algunos de los principales:
- Reducción del estrés. Trabajar con las manos y concentrarse en la creación de piezas puede ser muy relajante y una forma efectiva de reducir el estrés y la ansiedad.
- Mejora de la coordinación y destreza manual. Esta actividad requiere precisión y control de los movimientos, lo que ayuda a mejorar la coordinación ojo-mano y la destreza manual.
- Estimulación de la creatividad. La cerámica ofrece infinitas posibilidades creativas, permitiendo a las personas expresarse artísticamente y experimentar con formas, colores y texturas.
- Sentido de logro y satisfacción. Crear algo desde cero y ver el producto terminado puede generar un gran sentido de logro y satisfacción personal.
- Desarrollo de la paciencia y la perseverancia. La cerámica es un proceso que puede ser lento y requiere paciencia y perseverancia para obtener buenos resultados; un aprendizaje que puede trasladarse a otras áreas de la vida.
- Mejora de la concentración y la atención plena. Al enfocarse en el proceso de modelado y el trabajo con el torno, las personas pueden practicar la atención plena (mindfulness) y mejorar su capacidad de concentración.
- Conexión social. Participar en clases de cerámica o talleres puede ser una excelente manera de conocer a otras personas con intereses similares y crear una comunidad.
- Beneficios terapéuticos. La cerámica se utiliza en terapias ocupacionales y artísticas para ayudar a personas con diversas condiciones físicas y mentales, ya que puede mejorar la movilidad, la función cognitiva y el bienestar emocional.
- Conexión con la naturaleza. Trabajar con arcilla y otros materiales naturales puede ayudar a las personas a sentirse más conectadas con la naturaleza y a apreciar la simplicidad de los elementos naturales.
- Desarrollo de habilidades técnicas. La cerámica implica aprender técnicas específicas y desarrollar habilidades, lo cual puede ser un reto gratificante, y además, contribuir a desenfocar los pensaminentos intrusivos.
Hacer cerámica no solo es una actividad creativa y artística, sino que también proporciona una serie de beneficios que pueden mejorar la calidad de vida de las personas.
Perjuicio de algunas aficiones en los TCA
Deportes y actividades físicas intensas. Aficiones que implican una fuerte presión sobre el cuerpo, como el ballet, el atletismo o el modelaje, pueden agravar un TCA, especialmente si hay una cultura alrededor de la delgadez o la perfección física. Las personas con un TCA pueden utilizar estas actividades como un medio de control sobre su peso o imagen corporal.
Aficiones centradas en la estética. Actividades como el maquillaje, la moda o la fotografía de retratos pueden, en algunos casos, exacerbar las preocupaciones relacionadas con la apariencia física si se convierten en una fuente de estrés o comparación constante.
Redes sociales y plataformas online. Estas actividades implican el uso excesivo de redes sociales o plataformas que promueven ciertos estándares de belleza y pueden perpetuar las comparaciones corporales y la dismorfia, lo cual es frecuente en personas con TCA.